
Mt 27:50 «Mas Jesús, habiendo otra vez clamado a gran voz, entregó el espíritu.»
Una vida de amor y servicio se termina con la muerte más injusta, a pesar de todo el quebrantamiento, Jesús permaneció fiel hasta la muerte.
Nosotros somos desafiados por nuestro maestro a una vida también fiel hasta la muerte.
Los discípulos aprendieron de Jesús, y a pesar de las traiciones, cuando le vieron resucitado su compromiso fue distinto, a tal extremo, que la mayoría de ellos murieron como mártires, por amor a su maestro.
Es muy posible que no muramos en medio de persecución como ellos, pero de seguro son muchas las cosas en la vida que probarán nuestra fidelidad.
Nuestro Señor está vivo y dispuesto a acompañarnos en cada circunstancia.
Recuerde y crea, el dijo «Yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo, amén.»
Atte. Pastor Campusano.